Aquí en
mi reflejo, que mas puedo decir? Nunca fui como ellos pero ahora puedo
aparentarlo. No quiero pedir mas perdón por mis pecados ni reconocerlos como
tal. He visto un millón de personas, he
visto un mundo nuevo. He conocido por fin el exterior. Nunca había rezado, pero
esta noche me encuentro arrodillada. Sabes cómo mojar mis alas, prohibiéndome
volar. Sabes que con tus ojos me logras juzgar, y la peste destructora de cada
una de tus palabras me sabe destruir. Como las rosas me cubro de espinas, ya no
seré la misma. Ya no habrá más inocencia ni esperanzas, ilusiones o promesas,
no soy lo mismo que ayer, no quiero las mismas cosas hoy. Pero lo que un día
destruye habrá un mañana para arreglarlo. Nunca lograras cambiar el pasado,
solo queda mejorar el futuro. Vive y sueña como quieras, haz lo que más deseas
y lo que creas correcto. El mundo no es como antes, ahora ya acaba; y no hay tiempo que de tiempo para pensar tanto tiempo.
Bienvenida a mi tonta vida. Fuera de lugar e incomprendida, vivo llena de preguntas y soy tímida generalmente. No podría decir porque me siento así todos los días. Me gusta escuchar lo que para muchos es ruido, leer y escribir. Cada día al despertar, detesto mirarme al espejo porque me odio profundamente; me gusta tomar té, comer muchas mandarinas, las cosas simples y hacer reír a la gente. Me gustan mucho las hamacas. Tomo para no enamorarme, pero me enamoro igual. Espero al hombre que pueda hacerme feliz, aunque en el fondo sé que eso nunca va a ocurrir. “Un día sin risas es un día perdido”.
NOTA: La dueña de este blog expresa todos sus sentimientos, si el lector no está de acuerdo con el contenido de esta página, está invitado a retirarse.