Evernight II

 Teníamos las narices a tan poca distancia que pensé que con un leve movimiento podíamos rozarlas. Pero lo más impresionante eran los ojos.

Mis ojos, los suyos.

“te quiero” me dijo.

Y me dio un beso.

Me rozo los labios. Y lo único que sentí fue una cosquilla en la panza.

El me beso. Porque yo estaba paralizada. Y empezó a tiritar, pero no de frio, sino de nervios.

Simón me seguía mirando con sus ojos grises. O eran los míos? Me saco el pelo de la cara. Y me dio un beso en serio.

Mi primer beso.

Después me miro y me volvió a decir “Te quiero"